8.5.08

Odio


Un flashback. 1996 y aún conduzco la Vitara blanca que supo sobrevivir a varios huracanes y a la caída de un muro decorativo que la debió de haber hecho trizas una madrugada de septiembre. 1996; y allí estoy, en la misma aula de hace varios años ya con mi cara de tiza aspirando el hollín de la enseñanza como quien mira un par de hormigas aplastadas con el culo de un vaso que nunca se pudo llenar. Otros desastres hubo: malas borracheras de chinchorros con billar, palizas literarias de ida y vuelta, zozobras ideológicas entre cervezas robadas a los puestos del festival de Claridad de entonces (gracias a Fidel, por supuesto), y puteros de malísima leche con amigos que después terminaron enclaustrados entre cuatro paredes sin ventanuco bajo las órdenes de un abad. 1996 y el tiempo seduce (la seducción nunca ha dejado de ser la cabronada del otro). Entre las ruinas: la canción que redescubro estos días tras tanto tiempo y me tiende la trampa: Odio, de Lopo Drido; punk que me inoculaba a gusto y gana tras toda falta de respuesta. "Porque somos espejos, / acaso no te cansas de ti mismo". La muy cabrona parece seguir teniendo la misma vigencia hoy. La paso. Putañeramente. Y otra vez: salud!



6 Comentarios:

Anonymous Anónimo said...

Odio?? Un poco irreverente la cancion o me equivoco??? A que viene esto amigo...

RaquelZur

8/5/08 10:10 p. m.  
Blogger Rodrigo Köstner said...

Pura catarsis, Sra. Raquel. Pura catarsis. En ocasiones resulta saludable abrir una lata de gusanos.

Saludo.

10/5/08 11:51 a. m.  
Blogger Arlene Griselle said...

UNA LATA DE GUSANOS Y SI LA ACOMPANAS CON UN VINO, AUNQUE NO SEA MUY BUENO, MEJOR

UN SALUDO

14/5/08 9:55 p. m.  
Blogger Jorge David Capiello-Ortiz said...

Este comentario ha sido eliminado por el autor.

15/5/08 2:17 a. m.  
Blogger Jorge David Capiello-Ortiz said...

Si de eso se trata hermano de las letr(in)as, lo mismo una lata que un gusano. Pero en honor a las damas que lo acompañan con buen alcohol, que sea tequila y de paso, con el gusano bien gordo. Eso si, sea como sea, al gusano hay que darle con mucho odio.

El Copista

15/5/08 2:21 a. m.  
Blogger Rodrigo Köstner said...

Querida Griselle: aprecio la sugerencia, pero no soy chancho vinero. Prefiero en todo caso los licores puros. Un trancazo grueso de ron, de güisqui o de vodka; y el hígado termina latiendo como un corazón. Paso también de la cerveza. Y saludo. Güeno saber de usté.
--
Querido C@pi: de la letr(in)a a la cantina, pues; y se hace el homenaje. Pongo la primera ronda de mezcal (que no de tequila). Y que el gusano se gane en batalla o por decisión. Damas incluidas. La próxima que sea un round de casquillos y termina siendo gang bang. Salú, hermano.

15/5/08 6:36 p. m.  

Publicar un comentario

<< Home

buscadores
Free gratis counter